Páginas

LA INDUSTRIA DEL CERCO SE DIVERSIFICA

Una de las grandes virtudes  de la SMMP y que la hizo marcar diferencias con el resto de empresas industriales europeas durante décadas fue  la apuesta por la Innovación, Investigación y Desarrollo sobre cualquier recurso que controlaba.  Así,  tras descubrir que las galenas de la Mina de San Froilán (Ciudad Real), adquirida 15 años antes, no sólo poseían un gran tenor de plomo sino también de blendas, decidió construir en 1908 una nueva fundición para recuperar el zinc  contenido en ellas.

De la tostación de las blendas se obtiene como subproducto  ácido sulfúrico, sustancia fundamental para la fabricación de explosivos y fertilizantes, además de su conocida función en la purificación del plomo y de la plata.

El taller de tostación de zinc dio una producción de ácido sulfúrico superior al consumo interno, por lo que los ingenieros pensaron que el excedente podría dedicarse a la producción de superfosfatos y otros abonos químicos inorgánicos cuya base era el fósforo (sulfato de cobre y sulfato de amonio), de gran demanda en explotaciones agrícolas.

De modo que en 1909 finalizaron los estudios para construir una fábrica de  ácido sulfúrico y otra de superfosfatos. El emplazamiento escogido fue el de las escombreras de la mina Terrible. La demanda de estos productos llegó a ser tan grande que en 1911 la mencionada fábrica se amplió para triplicar la producción.

Las buenas perspectivas y los resultados de estas actividades dieron lugar a la creación de otra filial: la Sociedad de Piritas de Sevilla con el fin  de  asegurarse el abastecimiento de azufre para los superfosfatos, ahora que sus expectativas superaban con creces las posibilidades de los gases de las blendas.

Lógicamente,  estas ampliaciones se veían correspondidas con un aumento del número de trabajadores pacenses, andaluces y manchegos principalmente, además de algunos franceses, portugueses e italianos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario